lunes, 30 de septiembre de 2013

Por: Claudia Paulina Carranco Morón

En el cuadro aparecen tres personas  desnudas, un hombre blanco  que  en este caso representa a (Hernán Cortés) y a sus pies un hombre al cual no se le ve el rostro , sentada  junto  al hombre blanco sujetándola de la mano esta una mujer la cual representa a la malinche .
Hay contrastes fuertes de luces y sombras, en las que ha desaparecido el negro sustituido por diversos matices de marrones y grises. El pintor resalta la luz en los dos cuerpos  al centro.
El rojo  en esta pintura nos podría simbolizar el poder, vitalidad, ambición, coraje, rabia.
El color negro es a la vez de protección, misterio, fuerza, austeridad, soledad.
Conclusión:

La pintura nos muestra, poder y sumisión, los rostros nos muestran grandeza y tristeza, pero a su vez sus manos son la unión y la mezcla de dos mundos encontrados, es un cuadro de múltiples contrastes tanto de color como de sentimientos expresados en él.

1 comentario:

  1. No brindas contexto alguno ¿qué cuadro es, cómo se llama, quién lo hizo, cuándo, con qué?, supongo que por la obviedad de los datos te pareció intrascendente la mención y esto nos lleva a algo importante: la pertinencia contemporánea de la obra seleccionada, lo contemporáneo es un concepto expandido pero al extenderlo tanto te complicas la existencia, existen infinidad de comentarios sobre Orozco y su intervención en el Hospicio Cabañas, todo lo que pretendas decir sobre él tiene que estar tan documentado como su existencia. En cuanto al texto, primero dices que el negro desaparece y es sustituido, más adelante que el negro es protección, misterio, etc. ¿quieres decir –al no estar- que el cuadro no es proteccionista, misterioso, etc.?, atendiste específicamente la información relacionada con el contenido simbólico pero lo aprovechas para omitir opiniones personales y, finalmente, al interrumpir la estructura con una desarticulada conclusión rompes con la posible continuidad.

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