El Mural Sol de Gabriel Orozco.

Por:  Fernando J. López Martínez

A pesar de ser criticado como un producto más del mercado ante los favoritismos de los galeristas, Gabriel Orozco es un artista que ha dado mucho de qué hablar influyendo con su trabajo en México y el extranjero.  Orozco mezcla el humor y lo banal con una sencillez que termina dando más fuerza a sus piezas. El es anti-espectacular y anti-heroico, no busca ser el artista de la gran técnica y es por eso que sus propuestas son siempre diferentes, encuentra la poesía e ironía en lo común de la vida diaria.  

La obra a la que me remitiré, es fácilmente reconocible en lo que es, principalmente por su nombre: “mural sol” recuerda al muralismo y el autor es nada menos que el hijo del muralista Mario Orozco Rivera, discípulo de David Alfaro Siqueiros.

Utiliza también lo trivial y la arbitrariedad; de esta forma, copiando el logo de la cerveza sol, modifica su sentido y contexto para convertirla en obra de arte. Al igual que en “gatos y sandías”, utiliza un producto al azar y lo cambia de lugar para alterar su significado. Además expone la abundancia excesiva de publicidad en el entorno urbano y cualquier evento público, mismos que han propiciado los medios y los productos que estos generan... la Cerveza Sol no es más que la Coca-Cola de Warhol.